Hacer obras en casa es uno de los retos a los que cualquier propietario tiene que enfrentarse tarde o temprano. Ya sea porque tenemos intención de vender y queremos que la casa esté en mejor estado. O simplemente porque debemos de conservarla para que siga siendo habitable y un lugar adecuado para vivir.
Llegados a este punto una de las preguntas más frecuentes que cualquiera se plantea es saber qué permisos hay que pedir para hacer obras en casa. Desde Inmobiliaria punto Barcelona te lo contamos.
Tipos de permisos para hacer obras en casa
Lo cierto es que dependiendo del tipo de obra que vayas a realizar será necesario que pidas un permiso u otro. Las licencias no son las mismas para cambiar la cocina de lugar que para pintar tu piso. Tampoco será lo mismo el papeleo o el precio de cada uno de ellos. En general los permisos para haber obras en casa se dividen en dos tipos:
- Permisos de obra mayor. Los permisos de obra mayor serán necesarios en los siguientes casos.
- Cuando procedamos a ampliar el espacio disponible. Ya sea en una vivienda de obra nueva o de segunda mano. Por ejemplo añadiendo un nuevo dormitorio.
- En caso de que llevemos a cabo obras que supongas una modificación estructural. Como el caso de la eliminación de pilares, tirar un muro de carga o crear huecos en fachada para construir nuevas ventanas.
- Si las condiciones de habitabilidad se ven modificadas. Estas condiciones vienen especificadas en el Decreto 145-1997 20-2007, Condiciones de Habitabilidad.
- Permisos de obra menor. Para obras que no supongan cambios estructurales, hablamos de permisos de obra menor. Por ejemplo si queremos pintar la vivienda, alicatar el baño, cambiar los muebles de la cocina o incluso ampliar un dormitorio.
Veamos a continuación las obras más frecuentes para que te resulte más sencillo comprender la diferencia y la documentación que tendrás que reunir para cumplir con la legislación vigente.
Qué permisos hay que pedir para hacer obras en casa. Principales tipos de reformas.
Si vas a modificar la distribución de la vivienda…
Como por ejemplo cambiar la cocina de sitio o convertir un par de dormitorios en uno grande. Este tipo de obras implican un cambio en la distribución de la vivienda, motivo por el cual será necesario solicitar varios permisos diferentes. Veamos cuáles.
- Licencia de obra menor. Siempre y cuando no se trate de cambios que afecten a la estructura de la vivienda la licencia necesaria será la de obra menor.
- Cumplir con el CTE y solicitar una nueva Cédula de Habitabilidad. El CTE o Código Técnico de Edificación marca las exigencias que se han de cumplir en las viviendas para que esta se consideren habitables. Al realizar cambios en la distribución es necesario asegurarse de que estos cumplen con el CTE y solicitar una nueva Cédula de Habitabilidad que confirme que realmente se puede vivir en estas nuevas zonas.
En caso de modernizar los acabados…
Por ejemplo dar una mano de pintura a la vivienda, cambiar los alicatados o incluso el suelo solo tenemos que pedir un permiso de obra menor puesto que no afecta estructuralmente a la vivienda ni a las condiciones de habitabilidad de la misma.
Si emprendemos reformas que afectan a elementos estructurales…
En estos casos sí tendremos que solicitar una licencia de obra mayor además de contar con un proyecto técnico creado por un arquitecto o arquitecto técnico. Este paso es imprescindible puesto que hay que asegurarse de que no se va a correr ningún riesgo al tocar un elemento estructural. Además, si se trata de una vivienda que se encuentra en una comunidad de vecinos deberemos de contar con la aprobación de estos en junta. Ya que los elementos estructurales son comunes.
Reformas de elementos comunitarios
Como las terrazas (que son comunitarios de uso privativo) o la fachada. Por ejemplo parar abrir una nueva ventana. En estos casos también necesitarás un permiso de obra mayor.